Época: Últimas taifas
Inicio: Año 1228
Fin: Año 1268

Antecedente:
Las últimas taifas



Comentario

La reforma del sistema monetario llevada a cabo por los almohades marcará notablemente las emisiones monetales del siglo XIII, tanto en al-Andalus como en el Norte de África, manteniéndose los nuevos tipos, aunque con ligeras modificaciones (hudíes, hafsíes, zayaníes, benimerines...) Si la emisión de monedas puede estar condicionada por factores de diversa índole (fiscal, económica, etcétera) el factor político desempeñará un papel determinante en las acuñaciones andalusíes de este período.Las emisiones de los últimos representantes del poder almohade en al-Andalus mantendrán los mismos rasgos de identidad, las mismas características que las de sus predecesores, pero no así las de aquellos que se enfrentaron a dicho poder o abjuraron de su doctrina. Es el caso de Abu l-Ala Idris ibn al-Mansur, gobernador de Sevilla que se levantó en 1227 contra su hermano el califa al-Adil. Proclamado califa con el título de al-Mamun, ya en Marrakech, repudió la doctrina almohade e hizo pública su desvinculación oficial respecto al Mahdi Ibn Tumart, ordenando suprimir en sus dominios el nombre del Mahdi del sermón y de las monedas, y volviendo los dirhames a la forma circular, según atestiguan las fuentes escritas (Ibn Abi Zar), aunque no haya quedado de ello testimonio numismático, conocido hasta la fecha, pues sólo se conoce un dinar o dobla suya anterior a la supresión del nombre del Mahdi, y por tanto como rebelde, antes de que fuera proclamado en Marrakech. En cambio, sí ha quedado constancia numismática de cómo su hijo, Abd al-Wahid II al-Rasid, mantuvo la supresión de la mención al Mahdi en sus primeras emisiones para volver a restablecerla a partir del año 631 H/1233 J. C. Así, en las doblas o dinares anteriores a dicha fecha, la leyenda al-Mahdi Iman alumma (el Mahdi imam de la Comunidad) (I.A.) es sustituida por la de al-Qurán huyyat Allah (el Corán prueba de Dios), y en los dirhames que, aunque con un cuadrado inscrito, son de forma circular, es sustituido el nombre de al-Mahdi por el de al-Rasid: al-Rasid imamu-na (al-Rasid nuestro Imán) (II.A.).También hay testimonios numismáticos contra al-Adil que, poco antes (1224), había protagonizado el gobernador de Córdoba Abd Allah ibn Mummad al-Bayyasi (el Baezano), quien se hizo fuerte en Baeza, llegando a aliarse con Fernando III de Castilla. Abd Allah al-Bayyasi llegó a acuñar moneda de oro (dinar o dobla), sin ceca ni fecha, con las características propias de la moneda almohade, aunque introduciendo nuevas leyendas en los segmentos superiores de ambas áreas, reconociendo al Mahdi e intitulándose amir al-muminin. Asimismo, se conocen acuñaciones de Abu Musa Imran, gobernador de Ceuta, donde se levantó contra su hermano al-Mamun, haciéndose proclamar emir con el título de al-Muayyad y llegando a emitir dirhames cuadrados en los que omitió la mención al Mahdi: (II.A.: el emir al-Muayyad billah / Abu Musa `Imran / descendiente de los emires ortodoxos).La revuelta general que tuvo lugar en al-Andalus trajo consigo el resurgimiento de poderes locales que retirarán su obediencia a los almohades. Este enfrentamiento quedará claramente reflejado en el cuño de las monedas a través de un elemento básico: la eliminación de la mención al Mahdi como Imam, que era característica esencial de las monedas almohades. En su lugar, reconocerán en las leyendas monetales bien al Abbasí (en sentido genérico), bien al califa abbasí reinante o incluso a Ibn Ammihi (ancesto de los abbasíes). A diferencia de las taifas del siglo XI, en este momento se produce un fenómeno de aglutinación territorial en torno a tres régulos: Ibn Hud (Murcia), Zayyan ibn Mardanis (Valencia) y Muhammad ibn al-Ahmar (Granada). Aparte de las emisiones de los Banu Hud de Murcia y de los nazaríes de Granada, son muy escasas las monedas conocidas de otras taifas que, aunque efímeras, llegaron a emitir moneda. Acuñaron tanto plata como oro, con diversidad de leyendas, y siguiendo éste unas veces el tipo almohade (cuadrado inscrito formado por doble línea) y otras el hafsí (cuadrado inscrito por triple línea, siendo la intermedia punteada).Una de estas taifas, que consiguió mantenerse independiente, fue Niebla, a cuyo frente se encontraba Ibn Mahfuz, que terminaría declarándose vasallo de Castilla. Emitió al menos moneda de plata (se ha conservado un dirham cuadrado de tipo almohade, sin ceca ni fecha) figurando en su cuño como emir del Algarve y reconociendo al Abbasí como imán (I.A.) en lugar de al Mahdi. Sevilla, independiente también y habiendo rechazado la soberanía de Ibn Hud, en cuyo nombre se había sublevado contra los almohades, estaba regida por un consejo municipal presidido por Abu Marwan Ahmad ibn Muhammad al-Bayi. Se conoce un dirham cuadrado con ceca de Sevilla y sin fecha en el que aparece, en vez de al-Mahdi, Ibn Ammihi como Imam (I.A.) y en la II.A. se puede leer: el emir al-Mu'tadid / bi-Allah Ahmad ben / Muhammad al-Bayi / Sevilla. La mención a Ibn Ammihi (el descendiente de su tío) parece referirse al descendiente del tío de Mahoma, es decir, al descendiente de Al-Abbas ibn al-Muttalib, ancestro de los Abbasíes.Zayyan ibn Mardanis, por su parte, también acuñó dirhames cuadrados de tipo almohade a su nombre (El emir al-Mu'ayyad bi-Allah / el guerrero sentificado en la senda de / Dios, Abu Yumail); dirhames sin fecha pero con la ceca de Valencia, en los que se reconoce al Abbasí como Imam en lugar de al Mahdi (I.A.).Asimismo, conocemos acuñaciones de Ceuta, que también en este período destacará como centro emisor de monedas, a cargo del gobernador independiente Abu al-Abbas Ahmad al-Yanasti quien, al menos al final de su mandato, reconoció la soberanía del califato abbasí de Oriente como pone de manifiesto su numerario (oro y plata). Sirva como ejemplo el dirham anónimo con fecha y ceca (II.A.) que se le puede atribuir sin lugar a dudas: acuñado en Ceuta, el último año de su gobierno (635 H/1237 J.C.), a nombre del califa abbasí reinante al-Mustansir bi-Allah, y de tipo hudí (inspirado en el quirate almorávide). Los ceutíes, tras la deposición de al-Yanasti volvieron a la obediencia almohade reconociendo nuevamente al califa al-Rasid quien nombró gobernador a Abu Ali Ibn Jalas. Pero este último no reconocerá al nuevo califa almohade Abu al-Hasan Ali sino a los hafsíes de Túnez. Tanto Ibn Jalas como su sucesor Ibn al-Sahid acuñaron en Ceuta excelentes doblas o dinares de tipo hafsí poniendo con ello claramente de manifiesto su sometimiento a la soberanía de Abu Zakariyya Yahya, quien aparece en las leyendas monetales como Emir Nobilísimo (al-amir alayall). El uso de cada uno de los tipos monetales en cada caso es un claro ejemplo del papel que desempeña la moneda como vehículo de propaganda político-religiosa al servicio del poder que la emite. Expulsado Ibn al-Sahid tras la muerte de Abu Zakariyya Yayha, toma el poder de la ciudad Abu al-Qasim al-Azafi, que reconocerá nominalmente al califa almohade Abu Hafs Umar al-Murtada, aun siendo de hecho independiente, volviendo así a acuñarse en Ceuta dinares de tipo almohade, de muy buena calidad y relativa abundancia, en relación con el resurgimiento económico de la ciudad.La taifa de los Banu Hud de Murcia, en este período, emitirá unas excelentes series numismáticas en plata y oro, con rasgos propios de identidad que han permitido hablar del tipo hudi. Unicamente se conocen acuñaciones (oro y plata) a nombre de Ibn Hud al Mutawakkil y de su hijo al-Watiq, así como los dinares anónimos atribuidos a Baha al-Dawla. El año 625 H./1228 J.C. Ibn Hud se había sublevado contra el califa almohade al-Mamun haciéndose reconocer en Murcia como Amir al-Muslimin (título que ya habían usado los almorávides y su antecesor al-Mustansir ibn Hud). Y como tal aparecerá en todos sus dinares, al igual que al-Watiq, que lo hará incluso como amir al-muslimin ibn amir almuslimin. Situándose bajo la autoridad de los califas de Bagdad, llegó a ser investido como su lugarteniente en al-Andalus. Este último aparece en una de sus piezas conocidas (1/2 dirham). Sus emisiones suponen un cambio total respecto a la tipología almohade. Las monedas vuelven a su forma circular, con o sin orlas de oro y con una única leyenda central las de plata; y se restablece la fecha, que había sido suprimida en las emisiones almohades. Se retorna así al estilo almorávide en su aspecto formal (como elemento de propaganda de oposición político-religiosa), si bien continuarán conservando el patrón ponderal almohade -4,655 gr- (pudiendo así ser competitivos). Los dinares sólo fueron acuñados en las cecas de Murcia y Játiva, mientras que la plata se batió en los talleres de Murcia, Játiva, Córdoba, Málaga y Sevilla.La relevancia de las emisiones de oro de los hudíes hay que relacionarla con el pago de parias, ya que Murcia pasó a ser tributaria de Castilla por el tratado de Alcaraz (640 11./1243 J.C.). Tradicionalmente la historiografía numismática andalusí las ha venido clasificando en tres series fundamentales: tipo almorávide (cospel circular sin cuadrado inscrito) al que responden las piezas (doblas, 1/2 y 1/4 de dobla) de los dos primeros hudíes, tipo almohade (doble cuadrado inscrito) que se restablece en relación con el vasallaje a Castilla y que será sustituido a partir del 649 H. por el tipo hafsi (triple cuadrado inscrito), comprendiendo ambos 1/2 y 1/4 de doblas anónimas acuñadas en Murcia y atribuidas a Baha' al-Dawla.Sólo han llegado hasta nosotros cuatro doblas atribuibles a Muhammad l Ibn al-Ahmar: una de tipo hafsí acuñada en Granada pero a nombre de Abu Zakariyya Yahya, bajo cuya soberanía se había alzado; otra de tipo almohade -como el resto de las emisiones posteriores de la dinastía- con ceca de Granada pero que sólo se conoce a través de un grabado; y una tercera dudosamente atribuida a la ceca de Málaga. Sólo la cuarta, de tipo almohade y a su nombre, no presenta dudas en su atribución. Acuñada en Madina Murcia, es el enlace numismático entre ambos reinos de taifas. En ella se reconoce al Malidi (II.A.), y aparece Ibn al-Ahmar -tal como lo hiciera Ibn Hud- como Emir de los musulmanes (amir a-lmuslimin/ al-galib bi-Allah / Muhammad Ibn Yusuf / Ibn Nasr ayadahu Allah). En la I.A. (anverso) puede leerse el lema característico de la dinastía: wa la galib ila Allah (I.A.).Los nazaríes acuñaron oro (doblas) y plata (dirhames) siguiendo la metrología y tipología almohades e introdujeron innovaciones al batir pequeñas monedas cuadradas de oro (dinarines) y feluses de cobre fechados. Sus cecas fueron Granada, la Alhambra, Almería, Málaga, Jaén, Guadix, Murcia y Ceuta.